El cantante que fue liberado el viernes pasado se reunió con la prensa para contar cómo transitó los días recluidos y cómo seguirá de ahora en más. 


El viernes pasado a últimas horas de la noche, Elián Valenzuela recibió la noticia que esperaba hace tiempo, y por disposición del juez Gabriel Castro, el artista fue liberado tras 100 días recluido en la DDI de Quilmes. 

Hoy, a cinco días de recuperar la libertad, L-Gante habló con la prensa acompañado por su abogado Diego Soto y allí contestó a las inquietudes de los periodistas y agradeció el “aguante”. 

“Estoy muy tranquilo, agradecido con (Diego) Storto, mi manager y la gente que estuvo haciéndome el aguante y que se tomó con seriedad mi situación. Estoy disfrutando, gastando este tiempo en pensar, en abrir la mente”, comenzó diciendo. 

Luego, aclaró una palabra que usó y que se interpretó mal apenas salió en libertad. “Dije que quiero endurecerme mentalmente, pero la palabra que quise decir era fortalecerme, lo aclaro porque cualquier cosa que diga se malinterpreta. Estoy tratando de organizarme de una manera mucho más cuidadosa, pensando cada paso, nunca hemos dejado de trabajar, estamos día a día enfocados en progresar. ¿Cuánto llevo afuera? ¿Tres, cuatro días?. ¡Cinco días! Con toda la emoción y la buena energía”, expresó feliz. 

Asimismo habló sobre el tratamiento que recibió en la DDI de Quilmes y cómo fue la convivencia con sus compañeros: “La estadía fue la verdad muy tranquila, hubo muchos rumores que he oído, como que era un preso VIP o todo lo contrario, se mostraba una celda muy precaria que tampoco fue verdad. Era un preso normal, y con el resto de los detenidos sabía que estábamos todos ahí en la misma, somos todos humanos, me llevé bien, con respeto, no tuve ninguna pelea, ni discusión ni mala conducta”, subrayó. 

Mientras que remarcó: “Me tomé la tranquilidad de recuperar el tiempo perdido solo con mi hija, que es el momento en que es chiquita y crece muy rápido. Después, lo que fue el tiempo que pasó, lo usé para adelantar mis objetivos para disfrutar”, señaló. 

También se tomó el tiempo para agradecer a su familia y a todos los que lo acompañaron durante su detención: “El grupo, la mafilia estuvo firme, ahí todos los días, algunos estuvieron todos los días pero algunos fueron y volvieron. Yo no me puedo olvidar que todos los días tenía a alguien preguntándome si quería la comida. Hicieron que no me faltara nada”.

“Estoy agradecido por este gran grupo de amigos míos, que se ha hablado mucho pero me considero inteligente y sé decidir, elegir, pero son opiniones. No voy a tirarme bajo un tren porque alguien me lo diga. Agradecido a todos los que me hicieron el aguante”, agradeció. 

No obstante detalló cómo fueron aquellas primeros días y la ilusión que iba decayendo a medida que los días pasaban: “Al principio llegas a un pasillo, te meten a una celda, estaba solo y estaba vacía, no había ni colchón. Lo primero que dije fue que iba a estar tranquilo y en soledad. No tengo que dejar en cuenta que mi vida es medio alborotada, son pocos los tiempos en los que estoy tranquilo y calmado pero porque siempre estamos brindados para la gente y eso a veces me puede perjudicar. Pero me gusta ser un tipo alcanzable, que me conozcan mas como persona y en ese caso me ayudó mucho. Me ilusioné muchas veces pensando que iba a salir rápido, pero a partir del día 40 dije: ‘Voy a dejar de darle importancia a los días, voy a hacer lo que se me ocurra para que pase´”, expresó. 

“El vínculo con los demás detenidos fue muy bueno, de mucho respeto, muchos querían brindarle una alegría a sus familiares y yo les daba una camiseta mía de Cumbia 420, o saludaba a los hijos cuando los iban a visitar. No era un líder porque no manejaba nada ahí adentro. En cuanto al ambiente artístico, hubo muchos que me visitaron y otros que en cierto momento estuvieron para conveniencia pero después ni un mensaje”, advirtió. 

Para cerrar hizo un análisis que compartió: “Con la mamá de Jamaica tenemos una relación medio loquita, yo estoy poniéndome en mente que mi hija algún día crecerá y que fui papá muy joven. Todavía no me terminé de rescatar yo y ya tengo una hija a la que le tengo que dar el ejemplo. Cuando crezca voy a comprender su análisis de si fui un buen padre”, contemplo. Y concluyó: “Los stickers me los puso Jamaica porque hoy es su cumple”, dijo feliz.