El Banco Central ofrecerá un “dólar soja” para que el campo liquide la cosecha
Lo anunció la entidad que dirige Miguel Pesce después de las duras críticas de Alberto Fernández, y de que el Gobierno negara varias veces esa posibilidad; estará disponible hasta el 31 de agosto
En medio de una escasez dólares en las reservas; de una corrida cambiaria y tras las duras críticas del presidente Alberto Fernández al sector agropecuario, el Banco Central (BCRA) aprobó hoy un nuevo instrumento que busca incentivar a los productores a que vendan su cosecha de soja. El régimen especial estará disponible hasta el 31 de agosto próximo.
Del 100% del valor de venta de los granos, un 30% podrá ser convertido al “dólar solidario” ($226), mientras que el otro 70% podrá depositarse con una cobertura frente a la devaluación. Cerca el BCRA, negaron que fuera un desdoblamiento del tipo de cambio o un “dólar soja”, ya que todo se sigue liquidando en el dólar oficial. Lo que permitiría el nuevo mecanismo oficial es otorgar un acceso diferenciado a un tipo de cambio más elevado para parte de la venta. “Por la soja que venden siguen obteniendo los mismos pesos que ayer. Eso no cambia”, explicaron fuentes oficiales.
A modo de ejemplo, según explicaron fuentes oficiales, en una venta de $1 millón de granos de soja, podrían adquirir algo más de US$1300 y además hacer un depósito retribuido por dólar oficial por $700.000.
La entidad que conduce Miguel Pesce informó que se permitirá que los productores realicen un depósito a la vista en las entidades financieras con retribución diaria variable en función de la evolución del tipo de cambio A3500, conocido como dólar link, por hasta el 70% del valor de la venta de granos. “Además, por el 30% restante se permitirá la Formación de Activos Externos, al valor del dólar oficial más el impuesto PAIS y las retenciones a cuenta que percibe la AFIP [ganancias y bienes personales, de hasta 45%]”, informó un comunicado enviado por el BCRA.
“Esta decisión del BCRA busca equilibrar a los productores agropecuarios con los beneficios que disponen los distintos sectores productivos, entre ellos, la libre disponibilidad de divisas por el incremento de las exportaciones que se realicen respecto del año anterior que aplica a la industria manufacturera; el Régimen de Fomento de Inversión para la Exportación o el régimen para la industria del Conocimiento que permite aplicar parte del incremento de las exportaciones al pago de la masa salarial”, afirmó la nota de prensa.
En diálogo con periodistas, vía Zoom, Pesce comentó que se trabajó en esta medida con el Ministerio de Agricultura y el Ministerio de Economía, y que también se consultó la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), pero que formalmente han tomado contacto con ninguna de las cámaras que agrupan al sector agropecuario. “Esto no genera ningún desdoblamiento, sino que es un instrumento financiero que les permite a los productores preservar el valor de su producción”, remarcó.
“En el caso del régimen para la venta de la cosecha de soja estará disponible hasta el 31 de agosto próximo”, se precisó en la entidad que dirige Pesce, en la que había negado en reiteradas oportunidades esta posibilidad. Algo similar había pasado en el Ministerio de Economía, a cargo de Silvina Batakis, actualmente en Washington.
Esta posibilidad queda habilitada, según subrayó Pesce, para los productores de soja que vendan a partir de ahora, pero también para los acopiadores y para los exportadores directos. “Con esto esperamos destrabar la dificultad que expresó el segmento agropecuario con respecto a la producción de soja, que venía demorada respecto de años anteriores”, comentó. .
Ante la pregunta sobre cuánto espera se liquidará de soja a partir de esta medida, Pesce señaló que la estimación es que en manos de los productores hay 2800 millones de dólares retenidos, más otros 2200 millones tiene la industria, sin precio a fijar. “Ese es el universo. Ahora veremos cuántos se adhieren. Lo que sí, ahora no vemos cuál puede ser el inconveniente para que se adhieran, ya que ahora tienen el instrumento que les permite conservar el valor de su activo”, afirmó.
Asimismo, el presidente del BCRA dijo que esta iniciativa no se le comunicó al Fondo Monetario Internacional (FMI), porque esto no afecta al acuerdo firmado con ese organismo. “No estamos alterando el tipo de cambio ni las reglas generales de acceso a la formación de activos externos. Es equivalente a lo que se le ha dado a otros sectores”, argumentó.
Un punto a destacar es que para quienes accedan al dólar mediante este instrumento que ahora les ofrece el Gobierno no se tendrá en cuenta la regla que impide comprar a aquellos que hayan comprado dólar MEP en los últimos 90 días, pero sí regirá para ellos la restricción para acceder al dólar MEP en los 90 días siguientes.
La intención oficial
Fuentes oficiales indicaron que la intención de este régimen de granos es “reconocer el valor en divisas” que tiene la soja y “despejar la incertidumbre” respecto a una devaluación. Así, el BCRA busca poder anticipar el ingreso de divisas a la economía con “un saldo económico neutro” (maneja el valor de dólar A3500 en el que se podrán constituir los depósitos). La AFIP recaudará el Impuesto País y la retención a cuenta de Ganancias en las compras de divisas.
En la actualidad, informaron las fuentes oficiales, el productor tiene como alternativa realizar un depósito por el total de la venta en un “plazo fijo chacarero”, que también se actualiza por el dólar A3500. La disponibilidad de esos fondos está condicionada por el plazo al que se realizó. “En cambio, ahora pueden realizar el depósito, tener esa remuneración y la disponibilidad inmediata. Tiene la ventaja de no asumir los riesgos de mantener la cosecha en los campos y poder aprovechar cualquier oportunidad de negocios por la disponibilidad inmediata y automática de los fondos”, explicaron.
Por el actual nivel de incertidumbre y pese a las liquidaciones récord por los altos precios de las commodities, el ritmo de comercialización de la soja, de 20,4 millones de toneladas a esta altura del año, es el más bajo en términos históricos. El volumen vendido está entre el registro del menor nivel en 17 años (es decir, desde que hay datos publicados). En julio de 2005, por ejemplo, lo comercializado de la oleaginosa era mayor: 25,45 millones de toneladas.
La foto general, en cambio, muestra que el ritmo de comercialización no exhibe grandes diferencias respecto de lo que suele ser habitual para la época si además se suman otros grano. La agroexportación, por ejemplo, hasta junio pasado llevaba ingresados más de US$19.000 millones, un 15% por encima de igual fecha del año pasado.