Nuestro país ahora está entre las dos fuerzas con mayores probabilidades de recibir a la máxima competencia.


A falta de quince meses para la decisión final y a siete años del inicio de la competencia, tres fuerzas bien marcadas compiten para quedarse con el Mundial 2030. En esa incesante puja, Argentina (que está acompañada por Uruguay, Chile y Paraguay) aumenta las expectativas de ser anfitrión. ¿La razón? El Ministro de Exteriores de Arabia Saudita, Faisal bin Farhan Al Saud, se puso en contacto con sus enlaces de Grecia Egipto para comunicarles que desisten de la chance de ser candidatos.

Para convertirse en anfitrión de una competencia de este relieve se necesitan varios atributos, pero dos de ellos inclinan la balanza hacia la decisión final: el dinero y las influencias políticas. Si bien Sudamérica no está en condiciones de competir monetariamente con los países potencia, hace méritos con los lazos sentimentales. Es que Gianni Infantino Claudio Tapia tienen una admirable amistad que se potenció recientemente con la visita del mandamás a nuestro territorio para ver el campeonato Sub 20.

En América Latina consideran que las chances son reales y actúan en consecuencia. Cada acción tiene un trasfondo, tratan de afianzar las relaciones diplomáticas con la entidad madre con sede en Suiza y buscan seducir con diversas acciones: hace poco tiempo la Conmebol anunció que construirá un estadio con capacidad para 45.000 personas; también hicieron sentir al presidente de la máxima entidad como si estuviera en su propia casa cuando visitó Argentina y ahora el guiño es ajeno.

Con una billetera infinita y con el antecedente de Qatar 2022Arabia Saudita tenía grandes chances de imponerse junto a sus laderos Grecia y Egipto, pero sorpresivamente hubo un cambio de planes. Una vez estudiado en detalle el marco real de las posibilidades, Arabia Saudita consideró que el resto de sus oponentes llevan un proceso de trabajo de muchos años que los posiciona un poco mejor.

A partir de esta razón, Sudamérica sólo queda con un competidor de peso: España-Portugal Marruecos, quienes este jueves precisamente se reunieron en Madrid para comenzar a analizar la candidatura conjunta.

Los funcionarios resaltaron durante el encuentro las “buenas relaciones” entre las naciones y diversos aspectos acerca de la candidatura conjunta para ser sede del Mundial 2030. Tras coincidir en que la unión de los tres países “multiplica” las potencialidades, los funcionarios destacaron que sería la primera vez que un Mundial masculino de fútbol se efectuará en dos continentes diferentes (Europa y África).

En el 2030 se cumplirán 100 años de la primera Copa del Mundo organizada por la FIFA, que se jugó en Uruguay y coronó campeón al equipo local, tras derrotar en la final a la Argentina por 4 a 2, el 30 de julio de 1930 en el estadio Centenario de Montevideo. Justamente por ser el “centenario”, los países rioplatenses sueñan en grande.